En medio del confuso incidente debió intervenir el padre del motorista para evitar que el ejecutor siguiera percutando el arma en contra de la víctima Luis Francisco Saavedra Guajardo, quien se desvaneció en el lugar, producto del sangramiento que le causaron los múltiples impactos a bala y de grueso calibre.
Malherido, el joven tenino fue auxiliado y llevado rápidamente a pabellón en el hospital de Curicó, donde fue objeto de al menos dos operaciones los días 17 y 26 de junio, para extraer los restos de los proyectiles balísticos que quedaron alojados en su cuerpo.
BALA EN EL CUELLO
Sin embargo, con este paciente pasó una cuestión insólita y que ni siquiera fue advertida por los médicos especialistas, ya que después de haber sido dado de alta Luis Francisco Saavedra Guajardo, seguía con una peligrosa bala alojada en el cuello, que lo mantenía constantemente inflamado, afectado por cuadros infecciosos y fiebre alta.De ese hecho se percató un tío del joven baleado, quien exigió que su familiar nuevamente fuera atendido y que se le tomaran radiografías, exámenes que dejaron al descubierto que efectivamente en el cuello del afectado se mantenía una bala de aproximadamente dos centímetros, más específicamente en la zona cervical derecha, desde donde se extrajo dicho proyectil.
Para su retiro, debieron pasar 46 días, siendo su última intervención el pasado 2 de agosto en el hospital de Curicó.
AGRESOR EN LIBERTAD
Luis Francisco Saavedra hoy se recupera satisfactoriamente después de esta traumática experiencia y su agresor Bernardo Carmona está en libertad después de haber cumplido 40 días en prisión preventiva y haber desarrollado un depósito judicial de 20 millones de pesos para reparar en algo el mal causado a la víctima.
Fuente: Vivimoslanoticia.cl